Madrid cuenta desde hace unas semanas con un nuevo local, que hará la delicia a los más golosos y sobre todo a todas las que vayan buscando un lugar 'chic' para quedar con sus amigas a tomar un té o un café. Fonty se instala en la capital (calle Castelló,12) para sorprendernos a todos.
El local, inspirado en los acogedores cafés de la costa este de Estados Unidos y en algunos cafés parisinos, donde la gente va a degustar café, compartir una conversación casual, leer el periódico y pedir algo saludable para comer o merendar, Fonty pretende crear una atmósfera moderna, sofisticada y afable, con un ambiente muy cuidado y a precios asequibles, con el objetivo de hacer sentir a sus clientes como en casa. Un lugar ideal para quedar con tus amigas para degustar uno de sus dulces o para cerrar un negocio con un buen sabor de boca...
Fonty
abre bajo el concepto de alta gastronomía en pastelería francesa. Con obrador
propio en el mismo local y cocina vista al público, destaca la bollería
artesanal, pasteles y dulces tradicionales franceses, semifríos y tartas, así
como una amplia gama de salados, que conforman los pilares de una carta elaborada
recuperando la tradición de los maestros pasteleros, panaderos y restauradores
de antaño y reinterpretando sus recetas con las técnicas más modernas.
En su carta dulces
espectaculares como propuestas de chocolate negro con maracuyá, avellana y caramelo o
limón y albahaca en sus tartas, junto a caracolas con naranja y chocolate o ‘financiers’,
pero no sólo hay dulce en su repertorio, ya que la carta se complementa con un
amplio surtido de platos salados, todo elaborado con las más importantes tradiciones pasteleras y los mejores ingredientes de
todo el mundo como, por ejemplo, el chocolate Valrhona, importado directamente
de Francia, o el café, de
molienda fresca proveniente de los mejores proveedores de Colombia y Brasil.
Fonty, de clara inspiración francesa, tiene un toque internacional y muy
personal, ya que está influenciada por cada uno de los lugares donde los
propietarios, Luís y Marie Valdez, por lo que su repostería respira esencias de Stanford, Nueva York, Praga o Fontainebleau... ¿Te lo vas a perder?
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